He perdido la cuenta de las veces que me habéis preguntado cuántas sesiones de fisioterapia son necesarias para una contractura, cuántas sesiones de fisioterapia son necesarias por semana, cuántas sesiones de fisioterapia son necesarias para una tendinitis… Y siempre, siempre, os respondo lo mismo: Depende. Depende del tipo de lesión y de las características del paciente. Eso va influir muchísimo en el número total de sesiones de fisioterapia, y puede hacer que varíe mucho de una persona a otra.
Las compañías de seguros de salud, por ejemplo, sí que suelen dar un número. Creen que la respuesta es un número múltiplo de 5 calculado en base a lo que el profesional intuye que puede tardar en mejorar la lesión. Pero, como en muchas cosas en la vida, cantidad no tiene por qué ir asociado a calidad, ya que depende de muchos factores.
¿De qué depende que necesitemos más o menos sesiones de fisioterapia?
Si hablamos de los factores que podemos controlar nosotros, y que pueden ayudarnos a potenciar el tratamiento, podemos centrarnos en:
- La colaboración activa del paciente. Si el paciente ayuda durante el tratamiento, se interesa, hace los ejercicios… La lesión se recuperará antes.
- Una buena elección del fisioterapeuta. No es lo mismo alguien que acaba de salir de la carrera, que alguien con años de experiencia, especialización, etc. Importantísimo asegurarnos siempre de que el fisioterapeuta que nos vaya a tratar esté colegiado.
- Evitar a toda costa la automedicación. Muchas veces, tomar por nuestra cuenta ciertos fármacos como el ibuprofeno, puede hacer que una lesión no mejore o incluso empeore. Si quieres en que casos puede empeorar la lesión el tomar ibuprofeno, mira este post.
Además, hay otros factores que no podemos controlar, y que también van a influir en cuántas sesiones de fisioterapia son necesarias para la recuperación:
- El tipo de lesión. Por ejemplo, en una fractura de un hueso, siempre tenemos que esperar a que el hueso se repare y consolide para empezar el tratamiento de fisioterapia.
- Ciertas lesiones, como roturas de ligamentos, meniscos… Necesita un tiempo mínimo para poder reanudar el esfuerzo. Aun así, es importante saber que durante este tiempo también se puede trabajar con fisioterapia. De esta manera minimizamos las secuelas y aceleramos, en la medida de lo posible, la recuperación.
- El tipo de terapia o tratamiento empleado. Por ejemplo, no es lo mismo hacer el tratamiento sólo con terapia manual, que con punción seca, magnetoterapia, EPI, TENS… Por ejemplo, en el caso de la magnetoterapia, el número de sesiones necesarias varía mucho según el tipo de enfermedad, Pero no sólo depende del tipo del tratamiento, sino del:
- Lugar o zona de la lesión. Hay zonas que se pueden tratar muy bien con punción seca, y que en una sesión pueden estar resueltas. En cambio, hay otras zonas del cuerpo en el que este tipo de tratamientos no están indicados, y con terapia manual puede tardar más. Por ejemplo, para tratar el glúteo medio, con punción seca se puede solucionar mucho más rápido que con terapia manual, ya que al ser músculos profundos, es difícil tratarlos bien sólo manualmente. Eso no quiere decir que con terapia manual siempre vayamos a tardar más en hacer el tratamiento. Como hemos comentado anteriormente, también influirá el que el paciente haga los ejercicios, colabore, etc.
- Adecuación del entorno en el tratamiento domiciliario. Una de las cosas que más puede ayudarnos a obtener todos los beneficios de la fisioterapia a domicilio es el adecuar nuestro entorno. De esta manera, podemos mejorar la movilidad, fomentar la autonomía o mejorar la eficacia de los ejercicios pautados.
En estos casos una buena valoración fisioterápica es muy importante para ir fijando los objetivos de cada etapa de recuperación, e ir trabajando para optimizar los tiempos sin arriesgar más de lo necesario. Para ello realizará periódicamente ciertas valoraciones (reevaluaciones): al principio para determinar la gravedad de la lesión y conforme avance el tratamiento para comprobar su evaluación.
Entonces, ¿cuántas sesiones son necesarias para recuparse?
Podemos plantear la rehabilitación como la reforma de una casa. Es imposible dar un presupuesto económico, y decir cuánto tiempo se tardará en realizar la obra, si no se ha medido antes la casa, si no sabemos si hay que cambiar la instalación eléctrica, si hay que tirar paredes… Tiene que acudir un profesional a la vivienda, medir todo correctamente, y sólo después podrá dar un presupuesto. Y aun así, habiendo hecho bien todo el trabajo de evaluación, es probable que surjan imprevistos y ese presupuesto se vea afectado, ya sea para bien o para mal.
Lo mismo ocurre con la fisioterapia. Cada cuerpo es un mundo, y para poder aproximar cuántas sesiones se necesitan, antes hay que realizar una buena valoración que englobe todos los aspectos que pueden influir en el tiempo de recuperación de la lesión.
Es muy importante también el asesorar al paciente, y su participación activa durante el proceso de rehabilitación; es decir, ejercicios y actividades que el fisioterapeuta indica al paciente para que los realice en casa, para mantener las mejoras conseguidas en las sesiones de tratamiento, consiguiendo que el paciente necesite menos sesiones, pero sean de más calidad.
Si estás pensando en realizar la rehabilitación, pero no tienes tiempo de acudir a un centro, aquí puedes encontrar información sobre la fisioterapia a domicilio.
Fuentes: Vitonica, Almusalud