¿Alguna vez te has preguntado qué ocurre en tu cuerpo cuando pasas horas sentado frente al ordenador o en el coche? Aunque hacer una hora de ejercicio al día parece un buen hábito, ¿realmente contrarresta los efectos de una jornada sedentaria? Aquí es donde entra el concepto de sedentario activo: personas que realizan actividad física diaria, pero mantienen un estilo de vida mayormente sedentario. Vamos a descubrir si la estrategia del sedentarismo activo es realmente efectiva así como los diferentes tipos de sedentarismo.
Sedentarismo Activo: ¿Qué Es y Cómo Afecta a Tu Cuerpo?
El sedentarismo activo se refiere a quienes combinan largos periodos de inactividad con sesiones de ejercicio diarias, buscando reducir el impacto negativo de pasar tantas horas sin moverse. Sin embargo, el cuerpo humano está diseñado para mantenerse en constante movimiento, y largas horas de inactividad pueden tener efectos acumulativos difíciles de revertir solo con una hora de ejercicio.
Factores comunes que favorecen el sedentarismo en nuestra sociedad incluyen:
- Jornadas de trabajo prolongadas en oficinas, frente al ordenador o en tareas donde es necesario estar de pie, pero inmóviles.
- Tiempo dedicado a actividades que requieren poca movilidad, como ver televisión, navegar en internet o usar el móvil.
- La falta de espacios y momentos para moverse, especialmente para quienes deben desplazarse en coche y no tienen una rutina activa fuera de su jornada.
Con todo esto, muchas personas pasan, en promedio, más de 10 horas diarias en una postura sedentaria. Y esto nos lleva a la siguiente pregunta:
¿Cómo Saber Si Soy Sedentario o Activo?
A veces, pensamos que hacer ejercicio diario es suficiente para evitar el sedentarismo, pero existen varios grados y tipos de actividad. ¿Como saber si soy sedentario o activo? Aquí algunos puntos para ayudarte a identificar tu nivel de actividad:
- Horas diarias sentado: Si pasas la mayor parte del día sin moverte, incluso si realizas una hora de ejercicio, es probable que te encuentres en la categoría de sedentario activo.
- Intervalos de movimiento: Si necesitas recordatorios para levantarte y moverte o pasas más de una hora seguido sin cambiar de postura, tu nivel de movimiento puede ser insuficiente.
- Frecuencia de pausas activas: Hacer pausas para caminar, estirarte y moverte de forma regular ayuda a reducir el impacto del sedentarismo en el cuerpo.
Con estas preguntas puedes evaluar si realmente te mantienes activo o si estás en un estado sedentario que requiere más movimiento a lo largo del día.
Tipos de Sedentarismo: No Todo Es Igual
Existen distintos niveles de sedentarismo según el tiempo que pasamos sin actividad física:
- Sedentarismo ligero: personas que pasan algunas horas sin moverse, pero incorporan varias pausas activas a lo largo del día.
- Sedentarismo moderado: quienes pasan la mayor parte del día sentados o en posturas estáticas, intercalando con algo de ejercicio.
- Sedentarismo severo: aquellos que prácticamente no se mueven en todo el día, con pocos o ningún momento de actividad física.
Conocer en qué nivel te encuentras es esencial para planificar cambios que reduzcan el impacto negativo en tu salud.
¿Funciona Realmente el Sedentarismo Activo?
En definitiva, no. Aunque realizar ejercicio siempre será beneficioso, una hora de actividad no compensa completamente las largas horas de sedentarismo. Estudios sugieren que lo ideal es integrar movimiento a lo largo de la jornada para evitar que el sedentarismo se convierta en un problema de salud.
Es mejor realizar pausas activas cada hora y moverte a lo largo del día, incluso en pequeñas dosis, en lugar de confiar únicamente en una sesión de entrenamiento para contrarrestar el sedentarismo. Así, además de reducir el impacto negativo de estar sentado, tendrás un efecto positivo constante en tu salud.
¿A qué esperas para empezar a moverte más en tu día a día? ¡Levántate, muévete y cuida de tu cuerpo!
