Hace poco, leíamos en la versión digital de uno de los diarios informativos más reconocidos de este país, un artículo sobre lo que los fisioterapeutas pueden hacer en el tratamiento de Fisioterapia y cáncer (si quieres leer el artículo, lo adjuntamos aquí). Es un área de la fisioterapia muy interesante, y a la vez una de las más desconocidas. Así que queremos poner nuestro granito de arena desde aquí, y ayudar a difundir la gran labor que se lleva acabo cuando se juntan fisioterapia y cáncer.
Como comentábamos, es un área bastante desconocida, tanto que, a nivel científico aun hay pocos trabajos que estudien la labor de la fisioterapia y cáncer avanzado y terminal. El tratamiento no se basa en curar al paciente, como todos sabemos, esa labor pertenece a los médicos. El tratamiento fisioterapéutico oncológico, se enfoca en paliar o disminuir los síntomas asociados al cáncer, como son el dolor, la debilidad muscular, el cansancio, a veces incluso la rotura o fisuras de huesos… Es decir, es un tratamiento de mantenimiento, para paliar los síntomas.
Un poco de historia
A principios del siglo XX (1900) el médico Georg Groddeck inauguró en Baden-Baden un sanatorio dedicado a personas gravemente enfermas, donde combinaba los baños, los masajes y la gimnasia con la psicoterapia.
En la década de los 90, la Medicina Tradicional China introdujo en el tratamiento de los pacientes con patologías neoplásicas la gimnasia, la respiración y la meditación.
Como podemos observar, en los últimos siglos ya se venía observando la importancia del ejercicio y del tratamiento manual en los pacientes con patologías graves y/o oncológicas.
La fisioterapia oncológica en la actualidad
Actualmente, es muy poco el tratamiento fisioterapéutico que se otorga a estos pacientes. Generalmente, aquellos que lo requieren suelen tener que hacerlo de manera privada, financiándolo con sus propios ahorros. Por ejemplo, de los 22398 pacientes ingresados en el Instituto Català d’Oncologia de l’Hospitalet (ICO-L’H) desde 1999 hasta 2004 en el Servicio de Cuidados Paliativos, sólo se realizó tratamiento fisioterapéutico con 1684 de ellos, es decir, el 7,5% de los pacientes. Las tasas promedio, para todos los años, de intervención de fisioterapia por 100 ingresos fueron: para oncología médica de 5,3, Radioterapia 22,5, Hematología Clínica 11,6 y Cuidados Paliativos 10,3. Es decir, suelen requerir mayor tratamiento los pacientes de Hematología y Cuidados Paliativos. Esto puede deberse a la grandísima diversidad de patología oncológica que encontramos, y a que, generalmente cuando encontramos más síntomas físicos como dolor muscular, cansancio, debilidad muscular, etc. es cuando más avanzada está la enfermedad.
¿En qué puede ayudar la fisioterapia oncológica?
Cuando se trata de pacientes oncológicos o de cuidados paliativos, la fisioterapia puede ayudar a tratar:
- El síndrome de inactividad y desuso, que da lugar a una impotencia funcional generalizada.
- La atrofia muscular, que es el deterioro progresivo de la masa muscular debido a su desuso. Esto es muy frecuente, sobretodo, en personas mayores.
- El dolor. Existe mínimo en un 50% de los pacientes en todas las etapas de la enfermedad, y hasta en un 70% cuanto más avanzado se encuentra el proceso oncológico, sobretodo si hablamos de patologías tumorales. La OMS estima que el dolor en la patología oncológica afecta aproximadamente a 3,5 millones de personas en todo el mundo. Toma especial importancia cuando hay riesgo de que se convierta en dolor crónico.
- La cefalea tensional.
- La artritis o la artrosis.
- Los edemas.
- Las cicatrices, sobretodo el dolor asociado a estas.
- Las contracturas musculares debidas a la tensión, a las posturas o posiciones forzadas, al encaramiento del paciente, etc.
- A la recuperación más rápida y eficaz de fracturas de huesos.
- Las neuralgias, que son los problemas que aparecen a nivel del nervio, que producen dolores eléctricos, muy molestos la mayoría de las veces.
- La hipomovilidad, que es la disminución de la movilidad del paciente por causas asociadas a la enfermedad o al ingreso hospitalarios.
- La fatiga crónica.
¿Qué tratamientos de fisioterapia existen para tratar el cáncer?
Las técnicas más utilizadas por la fisioterapia con los pacientes oncológicos son:
- La cinesiterapia, que consiste en el tratamiento mediante el movimiento. Se realizan cambios posturales, ejercicios pasivos, activos, gimnasia y actividades aeróbicas, respiraciones, psicomotricidad, biofeedback, etc. con el fin de mejorar la capacidad de movimiento del paciente, y hacer así que la hipomovilidad (y la hipotonía muchas veces asociada) disminuya.
- La reeducación de la marcha, para ayudar al paciente a ganar más confianza, estabilidad, y mejorar su calidad de vida, ya que se puede favorecer (en la medida de lo posible) un desplazamiento más autónomo sin necesidad de ayudas biomecánicas como andadores, sillas de rueda, etc.
- Realización de ejercicios controlados, que ejerce un efecto inmunomodulador, aumentando el calor metabólico, y favoreciendo así la mejora del riego sanguíneo de la piel. También incrementa el metabolismo nasal, intensifica la respiración celular mitocondria y libera mayor cantidad de radicales libres. Todo esto, promueve una mayor secreción de hormonas adenohipofisiarias, neurohipofisiarias y periféricas. Así mismo, el ejercicio también puede tener un efecto sedante, ayudando a afrontar mejor los episodios de distes, de depresión y de ansiedad que se suelen asociar a la patología oncológica.
- Masaje terapéutico. Se ha observado que también tiene un efecto inmunomodulador sobre los pacientes con cáncer.
- Hidroterapia, que consiste en la realización de terapia fisioterapéutica en el agua. Al realizarse la rehabilitación en el medio acuático, el paciente puede desenvolverse mejor y realizar mejor los movimientos, notando un mayor alivio del dolor y de la pesadez experimentada.
- Crioterapia. Consiste en la aplicación de frío en las zonas afectadas o más doloridas, ya sea mediante el uso de sprays, envolturas, hielo…
- Comunicación. La terapia Hands Off del paciente, también es muy importante en el tratamiento de pacientes con patología oncológica.
- La Fisioterapia respiratoria. Es una rama de la fisioterapia esencial en cáncer de pulmón, pero también otros tipos de cáncer que cursan con fatiga y disminución de oxígeno. También es muy útil para tratar las neumonías e infecciones respiratorias que, por desgracia, muchos pacientes cogen durante las hospitalizaciones. Si quieres saber más, tenemos mucho escrito sobre fisioterapia respiratoria.
¿Qué resultados da la fisioterapia oncológica?
Se ha encontrado que la demanda de la fisioterapia en el paciente con cáncer ingresado está aumentando. Además aporta numerosos beneficios, sobre todo en las fases finales de la vida, contribuyendo a incrementar la calidad de vida de estos pacientes:
Igualmente, al mejorar el tono muscular y aumentar la movilidad, puede ayudar a disminuir la percepción de dolor. El abordaje del dolor desde la fisioterapia se ha demostrado eficaz. Esto se traduce en la reducción del número de fármacos que necesitan los pacientes para tratar el dolor. Sobretodo aquellos como los AINES (hablamos del tratamiento no farmacológico del dolor aquí).
Al tratar el dolor y la fatigabilidad, también ayuda a que los pacientes puedan recuperar antes su rutinas diarias, así como sus relaciones sociales.
También encontramos una disminución de la necesidad de ayudas biomecánicas, ya que se ha observado que el 42% de los pacientes con cáncer necesitan hacer uso de un bastón, el 25% de la cama, el 18% de silla de ruedas, el 11% de andadores, y el 2% de muletas.
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Fuentes: Medes, Dialnet, Universidad de Salamanca GuardarGuardar