Desde hace un tiempo, el drenaje linfático va posicionándose como uno de los tratamientos estéticos favoritos para conseguir una figura perfecta. A veces, se usa también para reducir la celulitis. Pero, ¿el drenaje linfático adelgaza realmente o es sólo un rumor?
¿Cómo adelgaza el drenaje linfático manual?
El drenaje linfático manual es una especie de masaje suave, con movimientos muy lentos, rítmicos y repetitivos que estimula la circulación de los canales linfáticos. La linfa es el líquido blanquecino que circula por estos canales y es la encargada de recoger los productos de deshecho de las células para eliminarlos.
Es importante destacar que la linfa recorre un circuito muy parecido al de la sangre. De igual forma que la sangre, la linfa puede acumularse en determinadas zonas y producir hinchazón en el lugar.
El aplicar estos movimientos suaves estimulan la circulación de la linfa, puede desintoxicar y desinflamar las zonas con celulitis o edema (retención de líquidos). La mayoría de las veces se comete la equivocación o el error de pensar que esa retención de líquidos es un cúmulo de grasa. Es entonces, al perder esos centímetros, cuando se cree que se ha adelgazado. Aun así, lo correcto es decir que hemos disuelto ese cúmulo de líquido, y no que se haya perdido grasa.
Normalmente se necesitan varias sesiones de drenaje linfático para obtener resultados, Si se combinan con un tratamiento de nutrición y ejercicio, es aun más eficaz. Puesto que el drenaje linfático manual resulta tan efectivo, a menudo desde la medicina convencional se recomienda recibir varias sesiones tras un postoperatorio. Así se desinflama la zona y se recupera la normalidad de los tejidos.
¿Grasa o productos de deshecho?
Muchas veces, pensamos que el sobrepeso se debe a la cantidad de grasa acumulada en el cuerpo. Pero en muchos casos ese sobrepeso no es grasa, sino depósitos de productos de deshecho. En ocasiones, el organismo no puede liberarse de estos productos, ya sea por una mala alimentación prolongada en el tiempo o por unos hábitos de vida poco saludables.
Tanto las grasas saturadas como muchos aditivos tóxicos de la alimentación industrial quedan depositados en distintas partes del organismo. Cuando esas sustancias se estancan en el espacio que hay entre las células, el sistema linfático es el encargado de recogerlas y eliminarlas. El problema es que cuando el nivel de deshecho sobrepasa la capacidad de limpieza del sistema linfático, estas sustancias quedan almacenadas. Por consecuencia, se congestionan (y engordan) determinadas partes del cuerpo. Para reducirlo, se usa el drenaje linfático manual, el cual nos ayudará a ir moviendo la linfa y ayudando a que se reabsorba.
El drenaje linfático por sí mismo adelgaza ¿Mito o realidad?
Ateniéndonos a todo lo comentado anteriormente, si una persona tiene problemas de retención de líquidos, hinchazón de pies, hinchazón de abdomen, hinchazón de piernas o brazos o mala circulación venosa, sí que verá un cambio beneficioso al tratarse con drenaje linfático manual. Pero no conseguiremos eliminar la celulitis que se origine por un cúmulo de grasas o adelgazar esos kilos de más que nos sobran con tratamientos de drenaje linfático.
Eso sí, nuestra piel se verá mucho más tersa y con mejor aspecto después de terminar con el tratamiento y ayudaremos a desintoxicar el organismo sintiéndonos más ligeros y deshinchados.
Adelgazar combinando el drenaje linfático manual con otros tratamientos
Si combinamos las sesiones de drenaje linfático manual con otros tratamientos de aplicación externa, podemos obtener muy buenos resultados cuando se trata de adelgazar. Por supuesto, dando por hecho que de forma paralela estamos siguiendo una dieta sana y equilibrada y realizando ejercicio moderado que nos recomiende nuestro fisioterapeuta.
También podemos combinarlo con el uso de TENS para estimular la circulación de la zona tratada. Esto es muy útil para los casos de retención de líquidos, así como el uso del TENS en el embarazo. Es un tratamiento muy sencillo y muy asequible, que podemos aplicarnos nosotros mismos cómodamente desde casa con un aparato portatil de elctroterapia.
Drenaje linfático manual en tratamientos de belleza
Además de para adelgazar, el drenaje linfático manual se utiliza para diversos tratamientos de belleza, puesto que, al ayudar a la depuración interior del organismo, sus efectos pueden ser muy beneficiosos en distintos ámbitos:
- Arrugas y flaccidez El drenaje linfático manual ejerce un efecto muy beneficioso y reparador sobre las fibras elásticas del tejido y ayuda a que las células se regeneren con mayor rapidez y eficacia.
- Acné Sobre todo en los casos en los que el acné es tan severo que la piel rechaza cualquier tipo de sustancia aplicada de forma tópica, el drenaje linfático ayuda a depurar las capas profundas de la piel, a bajar la inflamación de la zona congestionada y a estimular el sistema inmunológico para atacar la infección.
- Post-cirugía: Después de una operación, especialmente si se trata de cirugía plástica, el drenaje linfático manual acelera la consistencia elástica del tejido, elimina con mayor rapidez el edema y la inflamación y ayuda a la recuperación del equilibrio fisiológico.
¿El drenaje linfático es una buena opción para adelgazar?
El Drenaje Linfático Manual es una técnica natural manual desarrollada hace poco más de cien años que cada vez se utiliza con más frecuencia en el campo de la medicina en general, pero que también cosecha grandes éxitos en el área de la estética.
No cabe duda de que el mejor tratamiento para adelgazar es seguir una dieta responsable que nos depure el organismo, comprometernos a realizar ejercicio moderado todos los días y a descansar con un sueño profundo y reparador. Estas son, en realidad, las claves para conseguir adelgazar con éxito y mantener un peso y un organismo saludables a largo plazo.
Sin embargo, como medidas complementarias podemos seguir algunos tratamientos que ayuden a nuestro cuerpo a depurar todas esas sustancias que no solo nos engordan, sino que también nos intoxican, para lo que el drenaje linfático manuales una de la más efectivas.
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