Hace tiempo hablábamos del uso que se le puede dar al TENS desde la fasioterapia. En concreto, hablamos de ciertos dolores y patologías para los que puede reducir eficazmente el dolor. Hoy hablamos de un uso mucho más liviano: TENS para estimulación muscular. La electroestimulación neuromuscular, se usa en:
TENS para rehabilitación médica
- Prevenir de la atrofia muscular durante periodos largos de inmovilización.
- El tratamiento de la atrofia.
- Conseguir una mayor estabilidad articular.
- El tratamiento de contracturas musculares.
- Tratar la espasticidad.
- Además, para el tratamiento del dolor.
Resistencia a la fatiga
La resistencia a la fatiga permite aumentar la capacidad muscular para soportar un trabajo intenso durante un mayor periodo de tiempo. El trabajo al que se somete a la musculatura conlleva una fuerte descomposición de Glicógeno y una importante producción de Acido Láctico.
Es importante mantener un ritmo de trabajo progresivo para favorecer la mejor adaptación del atleta y obtener unos resultados más favorables.
Estimulación Muscular con TENS para uso deportivo
- La recuperación muscular después de realizar un ejercicio intenso.
- Aumentar la fuerza muscular.
- Elevar la resistencia a la fatiga.
- Aumentar la intensidad del esfuerzo que se puede hacer durante un tiempo determinado.
- Mejorar la elasticidad muscular
Electroestimulación con TENS para mejorar el Endurecimiento
Entendiendo el endurecimiento como la intensidad del esfuerzo que se puede realizar durante un tiempo determinado. Para poder mejorarlo, hemos de aumentar la capacidad oxidativa de las fibras musculares. Como pasa con casi todos los programas de entrenamiento, es importante mantener un ritmo de trabajo progresivo, que permita una mejor adaptación del atleta, y obtener unos resultados más favorables.
Electroestimulación con TENS en Estética
- Reafirmación muscular.
- Tonificación muscular.
- Tratar la lipólisis.
- Por último, para tratamientos anticelulitis.
Espasticidad y descontracturante muscular
Enteniendo el endurecimiento como la intensidad del esfuerzo que se puede realizar durante un tiempo determinado, el entrenamiento para mejorarlo ha de centrarse en aumentar la capacidad oxidativa de las fibras musculares. Como pasa con casi todos los programas de entrenamiento, es importante mantener un ritmo de trabajo progresivo que permita una mejor adaptación.
Atrofia Muscular
Rehabilitación de músculos que han sufrido largos periodos de inmovilización. Por este motivo, estos músculos muestran una importante reducción de volumen. La experiencia demuestra que los mejores resultados, se obtienen cuando se realiza una estimulación progresiva.
Espasticidad y descontracturante muscular
La estimulación con frecuencias muy bajas es eficaz para reducir las contracturas y la tensión muscular durante el reposo. Además, sirve para tratar la musculatura espástica, relajar la musculatura y disminuir su espasticidad, un síntoma muy típico en enfermedades como el Parkinson.
TENS para Fortalecimiento muscular y fuerza explosiva
El fortalecimiento muscular está orientado a aumentar la resistencia de los músculos. Aunque, también se puede orientar a fortalecer la musculatura para prevenir lesiones como: esguinces de tobillo, luxaciones, lumbalgias, etc.
Los mejores resultados se obtienen realizando una estimulación progresiva. Para ello, hemos de usar frecuencias capaces de producir contracciones tetánicas en las fibras rápidas y de fuerza.
TENS con electroestimulación para la recuperación de lesiones
Para evitar los dolores, el agarrotamiento o las contracturas musculares después de realizar ejercicio, necesitaremos realizar ejercicios especiales para a aumentar el riego sanguíneo y soltar la musculatura.
Es recomendable trabajar, al menos, durante dos semanas con unas dos sesiones diarias. Es decir, cinco días a la semana. Aunque, siempre debe ser el preparador físico quien determine los tiempos, así como las secuencias que deben aplicarse.
Si quieres saber más sobre los usos del TENS…