Si durante el embarazo las mujeres pueden tener complicaciones, después también. Incontinencias, prolapsos, desgarros de pubis y la inestabilidad de la articulación sacroiliaca son ejemplos comunes de patologías postparto. Ahora mismo, lo que se recomienda para estas patologías, además de para recuperar la forma, son los hipopresivos en el postparto.
¿Por qué hipopresivos en el postparto y no abdominales clásicos?
Los abdominales clásicos, a pesar de lo extendidos que están, son negativos para nuestro cuerpo. Con el paso de los años, se han ido realizando estudios y se ha encontrado que en vez de aumentar, disminuyen el tono del suelo pélvico.(1)
Al realizar los ejercicios abdominales clásicos, producimos un gran aumento de la presión intraabdominal. Esta presión termina repercutiendo en el suelo pélvico, ya que es el que sujeta a las vísceras. Después del parto, el suelo pélvico se encuentra debilitado por el esfuerzo que ha hecho durante el embarazo y el trabajo del parto. Si le aumentamos el peso que tiene que sujetar, como hacemos al hacer abdominales clásicos, aumenta la probabilidad de tener patologías y/o lesionarnos.
¿Qué aportan los ejercicios hipopresivos en el postparto?
Actualmente, las pautas ante los problemas en el postparto son: rehabilitación de fisioterapia y realización de ejercicios hipopresivos. Esto no es exclusivo de los problemas postparto. Cualquier mujer, una vez pasada la cuarentena, debería hacer hipopresivos para mejorar el tono muscular de su abdomen, y además, recuperar el tono del suelo pélvico.
La práctica de hipopresivos tiene amplios beneficios en nuestro cuerpo, por ejemplo:
- Normaliza las tensiones musculares de nuestro abdomen
- Ayuda a regular la fuerza muscular y resistencia de esa zona de nuestro cuerpo
- Además, nos ayuda también a mejorar la respiración.
- Mejora la vascularización de los miembros inferiores
- Tonifica de manera significativa el suelo pélvico y la faja abdominal.
Asimismo, los ejercicios hipopresivos postparto disminuyen la actividad tónica del diafragma, es decir, hacen que se relaje. Al realizar los hipopresivos en el postparto, tiene además otros beneficios asociados:
- Ayudan a rehabilitar el suelo pélvico,
- Previene y/o mantiene el desarrollo de hernias inguinales
- Previenen y tratan otras disfunciones asociadas a esa etapa de nuestra vida y,
- Por último, pero no por ello menos importante, ayudan a reducir la cintura.(2)
¿Está recomendado algún deporte más aparte de los hipopresivos en el postparto?
El Pilates puede mejorar el tono del suelo pélvico, ya que trabaja con contracciones conjuntas del abdomen y del suelo pélvico.
En esta época d nuestra vida, hemos de tener un poco de cuidado con los esfuerzos que hacemos. Por este motivo, es recomendable acudir a fisioterapeuta especializado en Pilates. No solo por eso, sino que no todos los ejercicios de Pilates lo pueden hacer embarazadas o mujeres que acaban de parir. En consecuencia, necesitamos a un profesional de la salud que sepa valorarnos y decidir qué puede ayudarnos y qué no según nuestro estado físico.
Además, es imprescindible ir antes a un terapeuta para trabajar de forma específica el suelo pélvico, ya que si el suelo pélvico no tiene suficiente fuerza, al hacer los ejercicios puede producirse un descenso del suelo pélvico.
Si quieres saber en qué puede ayudar la fisioterapia durante el embarazo, te recomendamos la siguiente entrada: La fisioterapia en el embarazo.
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Bibliografía:
- Caufriez M, Fernández JC, Devroux I, Esparza S, y Schulmann C. Estudio de la compliance músculo conjuntiva del suelo pélvico en el postparto tras reeducación abdominal clásica. UROD A. 2007; 20(2): 92-97.
- Esparza S (2007). Gimnasia abdominal hipopresiva. Congreso franco español del suelo pélvico y pelviperineología, San Sebastian.
